miércoles, 17 de julio de 2013

Filtreando



Siempre he dicho que el flirteo es parte esencial de toda mujer, los coqueteos sutiles y las miradas indiscretas son parte de la vida diaria, El primer paso generalmente lo da el hombre pero previas señales de la mujer, Todos hemos salido alguna vez en plan de cacería un fin de semana.

Los lugares que hemos elegido como zona de caza han sido muchos pero casi siempre hemos preferido los lugares que congreguen a la mayor cantidad de personas posibles.

¿pero qué pasa cuando el flirteo es por Mensaje?

¿cómo asegurar que la otra persona corresponde de la misma manera que tú?

será acaso, ¿creer fielmente en lo que la otra parte escribe?

Es difícil decirlo a ciencia cierta pero al parecer una serie de factores confluyen antes de animarnos a entrar en acción.

 La primera barrera que se nos presenta es sin duda la timidez. No nos creemos capaces de vencer el miedo y acercarnos en persona y es por eso que ocupamos esta peligrosa arma de la comunicación.

Una parte esencial del flirteo, es sin duda en intercambio de miradas y a decir verdad con una cámara, aun después que te vez con la otra persona, no puedes asegurar que sean las mismas miradas intensas que tu le dabas o recibías en el momento.

Los estudiosos del tema del flirteo sostienen que todo el éxito del proceso se decide en 30 segundos y se le confiere a una mirada sostenida y decidida casi todo el éxito del proceso

Hoy me hago este cuestionamiento puesto que un día conocí a un chico y lo que inicio como una conversación de lo más natural, hoy 5 días después se  volvió un flirteo fuerte y descarado.

Llegue a un punto de maldecir mi mala suerte por estar encerrada en esa oficina, Metida entre las sabanas de mi cama o escribiendo en mi estudio.

Pero el punto esencial de esta divagación es:

¿Puede haber flirteo por mensaje?
¿Este puede ser real?
¿Son solo parte de los instintos reprimidos que uno guarda?
¿Es parte de la necesidad de sentirte desea?
¿Solo será que necesitas un poco de vanidad?
¿O es que necesitas tanto alimentar tu ego, que llegas al punto de hacer lo indispensable por lograr la admiración?

También puedo caer en la aseveración que todos traemos un voyerista dentro y que de alguna forma u otra se hace presente y latente y que al explotar, necesita ser visto por alguien más que un simple espejo

Aun no encuentro las respuestas correctas a todas y cada una de mis preguntas, lo que sí puedo asegurar, es que la excitación que sienten mis dedos con este hecho me hace escribir mucho más de lo un grandioso encuentro sexual me puede proporcionar y estoy segura, es algo que como escritor, no quiero perder.

Abril
17 de julio de 2013

20:10 horas.

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